Magia Natural Parte II

El uso de amuletos y talismanes, cuando son usados a causa de su potencia natural, es uno de los propósitos de esta magia. También pueden emplearse ciertos metales o piedras que atraigan a esas fuerzas, o bien los colores, por su afinidad con dichas fuerzas, así él sonido, la música y todos los elementos similares de este tipo.

El uso de los mántrams también en Magia Natural, aunque más bien pertenecen a la Ceremonial, si bien se usa para la generación de ciertas vibraciones en el éter, las cuales a su vez controlan las fuerzas. Toda la Magia Natural no es más que el conocimiento y empleo de las fuerzas ocultas de la Naturaleza, y la Magia Ceremonial, en realidad, se hace para obtener resultados de la Magia Natural, excepto cuando se invocan o evocan a los Devas.

La Magia Natural consiste en impartir ciertos grados de vibración a las energías de la Naturaleza o como generalmente de le llama: el éter, para que en esta forma queden controladas la electricidad y el magnetismo.

Para obtener buenos resultados, lo primero que se necesita es poseer una poderosa fuerza de voluntad casi omnipotente en su positividad, porque por medio de la voluntad somos capaces de mantener el estado de expresión externa, hacer que nuestra aura fluya hasta infundir en el éter que nos rodea. Lo segundo es una vívida imaginación capaz  de formar los cuadros mentales, lo tercero, una intensa concentración, y por último una fe y una confianza ilimitadas. Esos son los cuatro elementos necesarios para cada fase de la Magia.

La Magia Natural, sin embargo, no es tanto la actividad de la voluntad humana para influir directamente en las formas electromagnéticas, como lo es el empleo de los agentes físicos para obtener esos resultados. Pero en un sentido más amplio, la Magia Natural incluye cada aplicación y ejercicio de las fuerzas de la Naturaleza, siendo de esta forma realmente creativa por la formación de cuadros metales que se proyectan hacia lo externo, así como de la vibración que se trasmite al éter. Así es como podemos controlas las fuerzas electromagnéticas de la Naturaleza y verificar los trabajos que nos proponemos hacer.

Hasta el material con que nos vestimos tiene su efecto magnético sobre la Naturaleza, así como sobre ciertas plantas y maderas. El uso del hamamelis para localizar agua no es una superstición como muchos creen, ya que ciertas personas lo hacen verdaderamente. ¿Y por qué? Simplemente porque existe una afinidad entre el hamamelis y el agua, y ambos se buscan. La relación electromagnética está firmemente establecida entre los dos. También sirve para descubrir cosas, depósitos de metal, etcétera, y todo con el mismo principio. La vara adivinatoria y la mágica deberán ser hechas de ese material.

Existen otras clases de maderas que también tienen sus afinidades, así como metales, gomas y otras cosas por el estilo.

El trabajo de Van Helmont de Mesmer en el desarrollo del mesmerismo, extendieron considerablemente la Magia Natural, porque la base del mesmerismo es el magnetismo. No es sugestión en el tibio sentido que le han dado el moderno hipnotismo, sino que es el superior y gran principio magnético.

Mesmer y sus primeros discípulos emplearon la fuerza magnética, y por medio de ella estimularon ciertas facultades y produjeron ciertas condiciones que  el hipnotismo nunca han sido capaz de reproducir ni remotamente; la razón es que los hipnotizadores no han empleado inteligentemente esa fuerza magnética.

El mesmerismo por medio de la fuerza magnética es el control de la ley de los opuestos y su aplicación al organismo humano para producir ciertos cambios, para atraer ciertas influencias no sólo sobre el cuerpo, sino también sobre el alma y la mente; y sus resultados demuestran la verdad fundamental de los principios de la Magia Natural. Evidencio que la humanidad, el individuo, incorpora las fuerzas de la Naturaleza, que el hombre es el Microcosmos-Universo, que cada fuerza del Cosmos está en él y que atrayendo esas fuerzas para que operen en el principio correspondiente del hombre, estimuladas en alto grado para que se pongan en armonía con las grandes fuerzas de la Naturaleza, pueden ser colocadas bajo control y así obtener los resultados maravillosos que vemos manifestarse en el cuerpo humano bajo el control mesmérico.

Los mismos resultados pueden obtenerse por cualquier otro modo que establezca un estado de polaridad entre el hombre y la Naturaleza en la misma forma.

Un sujeto mesmerizado no está precisamente bajo el control de un Ego superior, como un mesmerista nos quisiera hacer creer, sino que ciertas facultades del ser humano están bajo un estímulo anormal de ciertas facultades del ser humano están bajo un estímulo anormal de otros poderes correspondientes de la Naturaleza. El mismo efecto se puede producir, en cierta medida, por medio de una carga de electricidad, sólo que es peligroso usarla.

No debemos olvidar, sin embargo, que existen ciertas drogas que producen efectos mesméricos, como el cloral, el hachís, el opio y todos los hipnólogos. La influencia que tienen sobre una persona dominada no es imaginaria, si no real. El delirium tremens es una prueba de la Magia Natural producida por una intoxicación alcohólica.

Encontramos, por lo tanto, que las fuerzas de la Naturaleza pueden ser controladas por ciertos agentes y una vez concentradas estimular las facultades del hombre o del animal para producir ciertos efectos.

En realidad, el uso de sustancias químicas como fertilizantes en agricultura, no es sino la aplicación de los poderes mágicos para estimular los principios correspondientes en las plantas y acelerar su desarrollo.

Una corriente eléctrica produciría el mismo efecto estimulando los principios correspondientes en las plantas. Todo lo que en esta rama se hace no es sino la operación de poder mágico, es decir, la aplicación de los poderes de la Naturaleza para la producción de resultados definidos.

La ley de correspondencia y la de los opuestos, siendo doble aspecto de la fuerza electromagnética, son las causas de la Magia Natural. Uno que sea capaz de controlar esta operación lo será para producir cualquier clase de resultados mágicos de obtener este resultado.

La Magia Natural es el uso de objetos materiales, sustancia de la misma especie, fuerzas, etcétera, como medio para alcanzar el control de la fuerza de la Naturaleza. Cualquiera que pueda hacer esto es un Mago Naturalista.

Todos los estudios del Mago tienen por fin obtener el conocimiento de estas leyes, entender las afinidades y antipatías de las fuerzas diversas de la Naturaleza, de los objetos, para que por medio de su uso asegura el control de la fuerza electromagnética, y por medio de ella la Ley de Simpatía y Antipatía.

Fuentes: Curso Práctico de Magia General de Magnus Brunus